La menta ha sido ampliamente usada en distintas culturas. Cuando hablamos de ella nos estamos refiriendo a las hojas de la planta de menta. Esta se emplea en la cocina y en múltiples esferas, que van desde repeler insectos hasta refrescar el aliento. Sin embargo.
¿sabías que la menta puede servir para cuidar de la piel?
Para las pieles muy grasientas
Se toma una cucharada de hojas. Se le añaden unas gotas de limón y se aplica la mezcla por toda la piel. Después de 20 minutos, se retira y se realiza un lavado con agua fría. Se verán maravillosos resultados.
Para los granos en la cara
La mente puede ayudar a eliminar esos granos tan desagradables que salieron en el rostro. Sólo prepara una mezcla con hojas de menta y avena. Aplícala alrededor de 20 minutos y luego lava con agua bien fría.
Para combatir el acné
Se debe machacar las hojas de menta hasta que se extraiga el zumo. Con ese jugo se frota el rostro, especialmente las áreas afectadas. Se deja actuar durante 30 minutos y se enjuaga con agua muy fría. Se precisa continuar con el uso para que tenga efectos permanentes.
La razón por la cual es tan efectiva la menta es porque contiene p ropiedades de enfriamiento natural que ayudan a aliviar la hinchazón, el escozor y el enrojecimiento, algo que se asocia con los brotes de acné.
La aplicación tópica de la menta por lo general no tiene efectos secundarios. En casos de piel muy sensible, hay que estar atentos a erupciones e irritabilidades y suspender el uso si hubiera algún efecto adverso.
¿sabías que la menta puede servir para cuidar de la piel?
Para las pieles muy grasientas
Se toma una cucharada de hojas. Se le añaden unas gotas de limón y se aplica la mezcla por toda la piel. Después de 20 minutos, se retira y se realiza un lavado con agua fría. Se verán maravillosos resultados.
Para los granos en la cara
La mente puede ayudar a eliminar esos granos tan desagradables que salieron en el rostro. Sólo prepara una mezcla con hojas de menta y avena. Aplícala alrededor de 20 minutos y luego lava con agua bien fría.
Para combatir el acné
Se debe machacar las hojas de menta hasta que se extraiga el zumo. Con ese jugo se frota el rostro, especialmente las áreas afectadas. Se deja actuar durante 30 minutos y se enjuaga con agua muy fría. Se precisa continuar con el uso para que tenga efectos permanentes.
La razón por la cual es tan efectiva la menta es porque contiene p ropiedades de enfriamiento natural que ayudan a aliviar la hinchazón, el escozor y el enrojecimiento, algo que se asocia con los brotes de acné.
La aplicación tópica de la menta por lo general no tiene efectos secundarios. En casos de piel muy sensible, hay que estar atentos a erupciones e irritabilidades y suspender el uso si hubiera algún efecto adverso.